Una apurada pareja le secuentra y nisiquiera así Yuki pierde su expresión socarrona. Pero cuando se entera que los perseguidores pertenecen a la mafia coreana, la cosa cambia. La chica china llamada Mari es raptada y se efectúa el intercambio de rehenes en el parque Mikasa de Yokosuka. ¿Qué es lo que quiere la mafia? Es el momento de ver a Yuki en acción...