Tras
la muerte de Enrique IV se desencadenó una cruenta y brutal guerra civil en el reino de España que tenía como fin apoderarse de las coronas de Castilla y León. La batalla de Peleagonzalo fue su punto culminante. Una joven de nombre Juana pasaría a formar parte de la leyenda popular cuando decidió acudir al campo de batalla ocultando su verdadera identidad. Vestida como un mancebo y adoptando el nombre de Diego Oliveros, Juana se reveló como una valerosa mujer combatiendo al lado de los Reyes Católicos. Venganzas y traiciones, pasiones y desencantos, promesas y deseos incumplidos se sucede vertiginosamente en esta trepidante narración.