Sí, tras 18 años desaparecido, Luca Torelli vuelve a las andadas y, como en la ficción el tiempo pasa volando, esos años se han multiplicado por dos y ya no estamos en 1936, sino en 1972. Torpedo es ahora un septuagenario con parkinson, pero con la misma mala baba de siempre, y sigue acompañado de su inseparable Rascal. Dos gánsteres achacosos que arrastran una negra leyenda cargada con mucho humor. Las nuevas historias de Torpedo siguen guionizadas por Enrique Sánchez Abulí, pero los lápices en esta ocasión los ha cogido el dibujante argentino Eduardo Risso (100 balas,
Batman Broken City…), otro de los grandes maestros del género negro. El libro se completa con un prólogo de Abulí, donde explica qué ha sido de la vida del protagonista del cómic durante este periodo de tiempo (entre el 36 y el 72), y un relato, a modo de epílogo, donde se refleja cómo el paso de los años, aunque no ha quitado dureza al personaje, sí que le ha hecho más vulnerable.Este cómic les gustará a todos los que han leído el integral de Torpedo, los relatos y las historias negras, además de a los seguidores del dibujante Eduardo Risso.