Gabriel Lecouvreur, alias el pulpo, no es un ángel, ni periodista, ni policía, es un simple téstigo de nuestra época. La curiosidad y su espíritu libertario le empujan a investigar los pequeños fallos de nuestro sistema, escondidos detrás de las noticias. La piel del oso Gabriel Lecouvreur, alias el pulpo, está deprimido: los cerceceros están en huelga y su relación con Cheryl pasa por un mal momento. Cuando encuentran a Jean-Baptiste Pujol descuartizado por un bicho desaparecido desde años en los confines de los Pirineos, no se lo piensa dos veces y vuelve a hacer sus maletas. ¡Menudo bicho raro ese Pujol, y un tio realmente pesado! ¡La montaña es bella! ¡Si, y también peligrosa!