Los ojos me fueron robados por una siniestra organización de tráfico de órganos. En su lugar, un misterioso cirujano de nombre BJ me implantó unos ojos divinos capaces de ver más allá de las cosas.
¡¡Tras ello, decidí dedicar mi diva a la medicina, a salvar vidas!! Detecto la raíz del mal y manejo el bisturí que la erradica... Mi nombre es Ray. Mi misión es sanar dolencias de cuerpo y espíritu. ¡¡He aquí un drama humano médico de gran éxito!!