El pillo que ha rovado el traje de Spidey y se está haciendo pasar por él le causa más de un quebradero de cabeza a nuestro vecino favorito, pero al final, como siempre, el Trepamuros consigue salir bien de todo ese embroso. Incluso tiene la oportunidad de darse cuenta de que el muchacho no es tan diferente a como era
Peter Parker, y de que tal vez aún hay esperanza para él.
Poco más tarde,
Spiderman se reencuentra con un viejo conocido cuandop el Zorro Negro, uno de los ladrones de joyas más conocidos del mundo, vuelve a actuar pese a que había prometido a Spidey que se retiraría del "negocio" para vivir con su familia. En un alarde de osadía, Spidey decide aprovechar el contacto con el Zorro Negro con un trafincante para colocar la famosa libreta de oro que consiguió gracias al Todopoderoso en las Secret Wars, pero ni siquiera cuando hace alguna pillería así las cosas le salen bien a nuestro amigo. El traficante ha sido asesinado por un misterioso mercenario llamado Azar, que se empeña también en perseguir a
Spiderman y al Zorro Negro. Pero, por una vez, los problemas de Parker son más importantes que los que tiene
Spiderman, pues están a punto de desahuciarle de su piso. Por suerte, una intervención a última hora de Mary Jane evita la tragecia. Por eso,
Spiderman tiene tiempo para volver a darle vueltas a la identidad del Duende hasta que recibe una petición de ayuda de Matt Murdock, o lo que es lo mismo de
Daredevil, quien se encuientra en una situación crítica...