La vida de Thorfinn cambia en un segundo, al ser esclavizado por el nuevo rey de Inglaterra. El joven ahora vive en Dinamarca, en la granja de Ketil. Despojado de su razón de vivir, sólo es una sombra de sí mismo. Su encuentro con Einar, un esclavo recientemente adquirido por su amo cambia su actitud. Por primera vez en su vida, Thorfinn tiene un amigo.