De pequeñas, Fumi y
Akira eran amigas inseparables, pero la distancia les hizo perder el contacto. Diez años después vuelven a encontrarse, solo para darse cuenta de que muchas cosas han cambiado, sobre todo la manera en que cada una concibe, siente y sufre el amor. Sin embargo, hay algo que se ha mantenido intacto pese al transcurrir del tiempo: el sentimiento de amistad entre estas dos jóvenes.