Hace muchos años Bill Mantlo presentaba a un pre-adolescente, Ollie Osnick, un niño rico, regordete y caprichoso capaz de inventar unos tentáculos similares a los de su idolatrado Octopus.
Tiempo después DeFalco nos sorprendía con la idea de que
Spiderman tuviera un colega más joven que lo acompañara en su lucha contra el crimen. Fue así como Ollie Osnick rediseñó sus tentáculos para que parecieran los brazos de una araña.
Y ahora Tom DeFalco se pregunta qué habría ocurrido con Ollie en el futuro donde habita la hija de Spiderman...