"Recuerdo mis pecados"
La investigación del asesinato de la capitana DeWolff acaba de forma sorprendente cuando
Spiderman y
Daredevil descubren que el auténtico responsable de los crímenes es en realidad un miembro del cuerpo de policía. Sin embargo, su detención provoca más de un problema de conciencia en
Spiderman, a quien
Daredevil no hace más que recordarle que el Trepamuros no es tan diferente del asesino a quien acaban de detener.
Poco más tarde, As, el misterioso pandillero, vuelve a cruzarse en el camino de Spidey, quien nunca había olvidado del todo el lamentable resultado de su primer enfrentamiento. Sin embargo, y como siempre ocurre con el Lanzarredes, nada es tan sencillo como parece: la realidad que rodea a As, y que le obliga a actuar tal y como lo hace, es totalmente incomprensible para
Spiderman, quein aun así se empeña en intentar cambiarle. Al final, el único resultado posible es abandonar una ciudad que parece que se ha vuelto demasiado peligrosa para As y su familia.
Pero si
Spiderman tiene problemas para que le consideren un héroe, no le ocurre lo mismo a
Peter Parker, que se convierte en una celebridad local cuando ahuyenta a unos pandilleros. Sin embargo, ni aún así conseguirá estar tranquilo: en ocasiones ser un héroe en tu barrio también puede ser un problema...