Al lector que se interne en estaas páginas le espera un placer muy particular. En contra de lo que suele ser común en los libros de viajes de todos los tiempos, en Sicilia. La piedra negra Julián Meza ha sabido evitar, com implacable rigor y certero buen gusto, toda disquisición inútil y toda retórica erudita, permitieno así al lector disfrutar en una forma directa y plena el paseo al que lo invita el autor.