Todo esto habló Jesús por parábolas a la gente, y sin parábolas no les hablaba; para que se cumpliese lo dicho por el profeta, cuando dijo: Abriré en parábolas mi boca; declararé cosas escondidas desde la fundación del mundo. (Mt. 13, 34-35) Las tradiciones espirituales han usado siempre el cuento para transmitir sus enseñanzas, pues los relatos son capaces de explicar, en su aparente simplicidad, los misterios más insondables y las verdades más elevadas. Por eso todos los grandes maestros espirituales han hablado siempre en parábolas. Hoy día está de actualidad la divulgación de cuentos con valores, pero llama la atención el hecho sorprendente de que los relatos cristianos son poco conocidos, llegando a pensar los mismos cristianos que son inexistentes, exceptuando el reducido mundo de las parábolas evangélicas. Junto a esto, existe una moda de divulgación de cuentos de las tradiciones orientales, destacando la tradición zen del budismo, la corriente hasídica del judaísmo, la tradición sufí del islamismo y los cuentos chinos taoístas. En este sentido, la intención fundamental de esta obra es conservar y transmitir el rico patrimonio de espiritualidad atesorado en los cuentos cristianos, para sacar de la oscuridad y el olvido una de las mayores y menos conocidas riquezas de la tradición cristiana. Laureano Benítez Grande-Caballero es licenciado en Filosofía y Letras. Ha publicado 16 obras, entre las que destacan: Orar con el Padre Pío, Orar con la vida de los santos, Orar con la palabra de los santos, El arca de la sabiduría, Luz en el santuario, El corazón dorado y El sufrimiento: un camino a la ple
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