A Tango le gusta mucho cuidar las ovejas, pero tiene un problema: es a lérgico a la lana. En su primera salida con el rebaño, se pone enfermo . Su dueño enfadado quiere deshacerse de él, pero su hijo encuentra un a solución: será el lazarillo de su amigo invidente. Tango echa de men os la montaña; se escapa y, entonces, empiezan sus arriesgadas y diver tidas aventuras.