Tristan, el mestizo, y Marc-Antoine, el heredero de la plantación Pérolles, se han criado y han crecido como dos hermanos. Pero, bajo el sol de las Antillas, la ley de la sangre es la más fuerte. Y ningún juramento, de amor o de amistad, podría resistir al cuarto de sangre negra que corre en las venas de Tristan… Esta sangre negra, heredera de su linaje, le prohíbe según las leyes y los prejuicios sociales, amar a Madeleine, la hermama de Marc-Antoine, y lo empujará hacia el mundo del filibusterismo y la libertad.