Lulú, una anodina madre de familia de 40 años hace dos semanas que ha abandonado a su familia y, sin previo aviso, se encuentra desaparecida. Su familia y amigos están consternados.Xavier, uno de sus amigos, le ha seguido la pista y una noche, todos reunidos, les cuenta las vivencias de Lulú durante su extraño viaje. Lulú dejó atrás su vida ordinaria al salir de su enésima entrevista de trabajo. No era un acto premeditado, simplemente sucedió. Se marchó con una mujer de la que no sabía nada y se concedió unos días de libertad, sola, en la costa, sin otroproyecto que saborear completamente, y sin culpabilidad, estas vacaciones inéditas.Sorprendida por su propia audacia, Lulú conoce a gentes extrañas y divertidas, las cuales, de un modo u otro, también se encuentran en los márgenes del mundo.En este segundo y último volumen, Lulú sigue su vagabundeo. Si su escapada se desarrolla a lo largo de 19 días, el tiempo de la narración continúa siendo el mismo: una noche en la terraza de
la casa familiar, donde todos los amigos de Lulú se encuentran reunidos. Pero esta vez, tomando el relevo de Xavier, es Morgane, la hija de Lulú, quien les cuenta qué le ha pasado a su madre.Lulú ha dejado a Charles, su camping y sus improbables amigos, pero sin embargo no ha regresado a su hogar. Ha decidido seguir la búsqueda de sí misma. Lulú conoce a Marthe, una anciana solitaria y ocurrente, en circunstancias un tanto explosivas. Lulú y Marthe, Marthe y Lulú, una complicidad desde muchos aspectos decisiva, ya que ella es el elemento esencial de este segundo libro.Embriagadora, alegre, peligrosa y cruel, la improvisada experiencia de Lulú hará de ella otra mujer.