Nuestra historia empieza en un lejano reino donde vivía un rey que era muy feliz. Pero un buen día, comenzó a estornudar. Con el tiempo los estornudos fueron a más y el rey no se podía controlar de ninguna manera. Los médicos lo examinaron. Pero no pudieron encontrar ninguna cura. Tampoco los sabios. Así que decidieron ofrecer un premio a quien encontrase un remedio para su mal.