¿Por qué al señor Chas se le ocurrió encomendar, en 1925, a los ingenieros Frehner y Guerrico el diseño de ese barrio donde la calle Dublín de repente se podía llamar Londres?
Los límites precisos de ese misterio urbano están configurados. Ventanas clausuradas, sueños de esclavitud, metáforas de la por entonces reciente dictadura militar, un túnel por el que un tren subterráneo hubiera permitido a Perón escapar de las acechanzas de la revolución libertadora.
La estrella del comic, Eduardo Risso, y el celebre guionista Ricardo Barreiro nos presentan un clásico de la historieta Argentina. El comic de suspense que da sentido al género