Siempre que hay guerra de bandas en New York, él está en medio.
Es el destino del Hombre Araña. Cuando los tipos duros de la ciudad, como Kingpin o Cabeza de Martillo, sacan la artillería pesada, sólo
Spiderman puede evitar la carnicería. Lo ha hecho en el pasado, y lo repetirá las veces que sean necesaria.
Pero esta vez los Hermanos Lobo han roto las reglas, y nada es como antes. Además, las batallas en las calles son más dificiles de ganar si en casa se masca la tragedia. ¿Tal vez las cosas hubieran sido diferentes si alguien se hubiera fijado en lo que le pasa a Kristy, la prima de Mary Jane que quiere ganar la atención de Peter a toda costa?