Los jóvenes, hombre y mujeres que pueblan estas historias son obcecados, inteligentes, despistados, pragmáticos y perdidamente románticos. Se enfrentan a circunstancias que pueden cambiar sus vidas, a intentos de conectar con otros, a una carrera que puede estar a punto de acabar, a la necesidad de irse de casa o a una amistad en crisis. Con su intuitivo oído para el diálogo y la caracterización de personajes, Jessica Abel nos ofrece una visión de primera mano de la juventud neoyorquina de finales de los 90.