La tercera edad de oro de la ficción televisiva ha favorecido la proliferación de series de gran despliegue técnico y a la vez de narrativas que describen la intimidad y la rutina cotidiana de los protagonistas. Son obras que nos presentan personajes alejados de la heroicidad, representados a menudo dentro del espacio doméstico, que ha pasado a ser un lugar clave para la descripción y evolución de los personajes. á Partiendo de la premisa que la ficción televisiva desarrolla una clara función de referencia y legitimación social, creando estereotipos y modelos en los que los espectadores se identifican, este libro analiza veinte de las series contemporáneas más populares, reflexionando sobre el rol paternal y maternal de sus protagonistas. En algunas series se encuentran ejemplos que se alejan de la descripción de la familia patriarcal convencional. Destacamos así la pluralidad de discursos que se están ofreciendo, aunque también observamos que muchas de ellas, a pesar de un envoltorio transgresor, siguen reproduciendo roles que alimentan los valores familiares tradicionales.